Los 33, a salvo

Terminó el docudrama en la mina sepultada más mediática y famosa de Chile (y por extensión, del mundo). Emoción, orgullo nacional y espectáculo mediático en el Campamento Esperanza. Es decir, un éxito total en la jornada de rescate de los mineros chilenos, atrapados desde el pasado 5 de agosto en mina San José. Felicidades y llantos. El parto múltiple culminaba a las 2,55 de esta madrugada (hora española, cinco horas menos en Chile). Para entonces era rescatado el último de los 33 mineros atrapados. Los que renacían desde las profundidades de la tierra de Atacama no eran niños sino hombres que se derretían de emoción al ver a sus seres queridos al otro lado del cordón umbilical, ese prodigioso pozo de 622 metros de profundidad. Uno a uno, en intervalos de unos 40 minutos, los mineros iban saliendo ayer de su 'cárcel' de piedra. Al otro lado del túnel les esperaban la alegría, los abrazos y las lágrimas de sus familiares. El rescate se realizó en la mitad del tiempo previsto. Estos mineros, actualmente héroes mediáticos (el rescate fue seguido por mil millones de personas alrededor del mundo) han estado atrapados 69 días en una mina a 700 metros de profundidad. Ya veremos si estos mineros sabrán digerir su repentina fama. El operativo de rescate funcionó bien durante toda la jornada. Hubo menos problemas de los previstos y el proceso de extracción sólo se paró brevemente para que los técnicos cambiaran una rueda. El presidente boliviano Evo Morales se reunió con su compatriota Carlos Mamani, el cuarto minero en ser rescatado. Una vez en la superficie, los mineros rescatados fueron trasladados en un helicóptero militar en grupos de tres o cuatro al hospital de la capital de la región de Atacama. El Gobierno chileno anunció ayer que ayudará a todos los rescatados a encontrar nuevos trabajos (otro tanto a favor del presidente, Sebastián Piñera). El mundo se congratula del éxito del rescate y la popularidad del presidente Piñera se dispara consolidando la derecha chilena.