Aprovechando que hace unos quince días los descubridores del grafeno fueron galardonados con el premio Nobel de Física voy a comentar de forma resumida y concisa las características de este extraordinario material y cómo fue descubierto. El material del siglo XXI es más revolucionario que el silicio y el oro en su momento. Procesa datos diez veces más deprisa, es fino como un pelo, flexible como el plástico y duro como el diamante. El éxito del grafeno reside en cómo es, no en lo que es. ¿Y qué es? El grafeno es tan carbono puro como el carbón, el grafito y el diamante. Pero la forma en la que están "ordenados" los átomos cambia enormemente sus propiedades. En el grafeno, los átomos de carbono están dispuestos en forma plana (bidimensional) en orden de panal de abeja. Eso lo convierte en un excelente conductor (eléctrico y térmico), se vuelve casi irrompible, y es más flexible que el plástico más deformable. Que el grafeno sea una capa de un sólo átomo de espesor le confiere cinco características nunca vistas. Las comparamos con las del silicio:
Velocidad. Los electrones corren por el grafeno a la máxima velocidad posible, como si no tuvieran masa. Los procesadores podrán alcanzar los 1000 GHz (10 veces más que los mejores de silicio).
Grosor. El grafeno, por definición, es una red en forma de panal de abeja de un solo átomo de espesor (0,1 nanómetros). El transistor de silicio más fino que se ha logrado fabricar mide 32 nanómetros.
Flexibilidad. El grafeno puede estirarse, doblarse... hasta un 10%. En cambio el silicio (en una sola pieza) no puede deformarse más de un 1% sin romperse.
Dureza y resistencia. Solamente el diamante, el material más duro (10 mohs), es capaz de rayar el grafeno. El silicio es más blando (6,5 mohs).
Poco imaginaban Geim y Novoselov cuande les dio por hacer un experimento con el grafito (el mineral de las minas de lápiz) y cinta adhesiva que les darían el Nobel por eso. A ellos se les ocurrió una idea barata que tenía más de bricolaje que de alta tecnología: usar la cinta adhesiva para arrancar láminas de carbono cada vez más finas.
Velocidad. Los electrones corren por el grafeno a la máxima velocidad posible, como si no tuvieran masa. Los procesadores podrán alcanzar los 1000 GHz (10 veces más que los mejores de silicio).
Grosor. El grafeno, por definición, es una red en forma de panal de abeja de un solo átomo de espesor (0,1 nanómetros). El transistor de silicio más fino que se ha logrado fabricar mide 32 nanómetros.
Flexibilidad. El grafeno puede estirarse, doblarse... hasta un 10%. En cambio el silicio (en una sola pieza) no puede deformarse más de un 1% sin romperse.
Dureza y resistencia. Solamente el diamante, el material más duro (10 mohs), es capaz de rayar el grafeno. El silicio es más blando (6,5 mohs).
Poco imaginaban Geim y Novoselov cuande les dio por hacer un experimento con el grafito (el mineral de las minas de lápiz) y cinta adhesiva que les darían el Nobel por eso. A ellos se les ocurrió una idea barata que tenía más de bricolaje que de alta tecnología: usar la cinta adhesiva para arrancar láminas de carbono cada vez más finas.
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