Milagro en Chile

Otra buena noticia (nunca me acostumbro a ellas). 33 mineros chilenos y por extensión todo un país, han vivido un milagro. El pasado cinco de agosto la mina de San José (Chile) en el desierto de Atacama se derrumbó atrapando a 33 mineros. Las 72 horas, que los técnicos indicaban como el plazo de supervivencia en función del oxígeno acumulado desde el derrumbe fatal, hacía tiempo que se habían cumplido. Además, un segundo derrumbe, durante la primera semana de búsqueda, sepultaba las esperanzas de los familiares, que ya pensaban en recuperar sólo cuerpos. Las deficiencias de seguridad en la explotación y la inexactitud de los planos complicaban las tareas de la búsqueda del refugio dónde se pensaba que se habían guarecido los trabajadores (obviamente se ha abierto una investigación para depurar responsabilidades). Pero pese a todos los pésimos indicios el domingo pasado llegó el milagro. El milagro de bicentenario, como ya lo llaman en el país andino, que el próximo 18 de septiembre celebrará los 200 años de su independencia. Una de las sondas traía a la superficie un mensaje de esperanza (como el apropiado nombre del campamento). Una escueta frase, escrita en un pedazo de papel con un rotulador rojo hizo estallar la euforia en Chile: "estamos bien en el refugio, los 33". Una vez cubierta las necesidades básicas de los mineros (pidieron alimentos, ciertas medicinas y cepillos de dientes) llega lo más difícil, el rescate. Se va a perforar un túnel paralelo de unos 80 cm de ancho para que los mineros sepultados puedan ser rescatados uno a uno. Sin embargo esta ardua tarea durará entre tres y cuatro meses. La perforadora Raisebore Strata 950 empezará a funcionar el próximo lunes. El presidente de la nación chilena, Sebastián Piñera, afirma que los supervivientes "estarán con nosotros en Navidad y Año Nuevo". Mientras tanto arrecian las críticas contra la empresa propietaria de la mina por no cumplir las normas básicas de seguridad y no garantizar la integridad física de sus trabajadores. Los propietarios no tienen intención de seguir con la mina y creen que no podrán pagar. Se espera una investigación exhaustiva por todo lo acontecido en la mina y también se espera un largo rescate. Será una larga espera pero con la seguridad de rescatar a todos los mineros con vida. Así lo espero. Por una vez, hubo un milagro.