domingo, 27 de junio de 2010

Tragedia en las vías

La noticia de la semana ha sido sin ninguna duda el trágico accidente acontecido en la estación de Platja de Castelldefels. Sobre las once y media de la noche del pasado miércoles (verbena de San Juan) unos treinta jóvenes cruzaron las vías del tren en la estación de Castelldefels y fueron arrollados por un tren de media distancia que no paraba en esa estación. En el accidente murieron doce personas (aunque en algún momento se pensó qué eran trece), la mayoría de origen latino americano y unas catorce sufrieron heridas de distinta consideración. Tres de los herido se encuentran en estado muy grave. Y aunque desconozco los motivos, el debate se ha abierto. No sé quienes, ni con qué intenciones quieren buscar los tres pies al gato por lo sucedido y culpar a la administración pertinente del trágico suceso. Vayamos por partes. Efectivamente el accidente fue un trágico suceso. La fatalidad quiso que en el momento que los jóvenes cruzaban las vías pasase otro tren a alta velocidad. Pero ¿por qué cruzaron esas personas las vías cuando está estrictamente prohibido hacerlo? La multa por circular o cruzar las vías del ferrocarril ascienden hasta 6000 euros. ¿Por qué no utilizaron el paso subterráneo habilitado y correctamente señalizado como hizo el resto de personas? ¿Por que los supervivientes y familiares de los fallecidos culpan a Renfe del accidente cuando lo más natural es que los trenes vayan sobre las vías? Las prisas, las ganas de juerga (no olvidemos que era la verbena de San Juan), la impunidad del grupo, la certeza (falsa como se ha comprobado) de que nada malo puede ocurrir cuando uno es joven, la mala educación de no esperar la cola para utilizar el paso subterráneo como hizo el resto de los presentes... He ahí la verdad de lo sucedido. La estación había sido remodelada recientemente, estaba correctamente equipada, el paso subterráneo tenía el ancho reglamentario y estaba correctamente señalizado, el tren circulaba a menos de la velocidad máxima permitida en la estación, tenía las luces encendidas y utilizó el silbato a modo de advertencia acústica. Qué fácil es descargar las responsabilidades en la administración y olvidarse que los ciudadanos son responsables de sus actos. Todos somos adultos (excepto los que sufrieron el atropello) y todos sabemos que no se puede cruzar una vía férrea (lo digo más que nada y sin ánimos de ser sarcásticos porque el tren tiene preferencia en las vías). Si lo hacemos es bajo nuestra responsabilidad, sabiendo que obramos mal, sabiendo que nos pueden multar y sabiendo que en el peor de los casos será nuestra última infracción. Se han abierto varias investigaciones (como debe ser) pero está claro cuales van a ser las conclusiones. Simple y llanamente imprudencia. Este trágico accidente, evitable a todas luces nos tiene que hacer reflexionar a todos. Y un recuerdo para el pobre maquinista, el gran olvidado, que nada pudo hacer para evitar la tragedia y que en su consciencia pesará para siempre la muerte de esas doce personas.

1 comentario:

  1. El Juzgado de primera instancia número 1 de Gavà ha archivado las diligencias abiertas a raíz del accidente de tren en la estación de Castelldefels Platja en la verbena de Sant Joan, donde murieron 12 personas.
    En la interlocutoria de archivo, el juez concluye que la causa del accidente en Castelldefels fue una actuación "imprudente y temeraria" de las víctimas. El tren Alaris tardó 39 segundos en frenar. En el momento del accidente, la salida estaba debidamente señalizada y el apeadero bien iluminado.

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