Hoy se celebra el Día Internacional de la Mujer Trabajadora. Desde 1975, Año Internacional de la Mujer, el Día Internacional de la Mujer se celebra el 8 de marzo "para conmemorar la lucha histórica por mejorar la vida de la mujer". Se celebra en todo el mundo a nivel local y nacional. Se conmemora la lucha de la mujer por su participación, en pie de igualdad con el hombre, en la sociedad y en su desarrollo integro como persona. Como ha dicho el Secretario General de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, «La igualdad de las mujeres y las niñas constituye también un imperativo económico y social. Hasta que no se logre liberar a las mujeres y las niñas de la pobreza y la injusticia, todos nuestros objetivos —la paz, la seguridad, el desarrollo sostenible— correrán peligro». Por desgracia, bien entrado ya el siglo XXI la mujer no se encuentra al mismo nivel que el hombre en cuanto a derechos y reconocimientos en las sociedades democráticas, y en los países en vías de desarrollo su situación es todavía peor (sin mencionar lo que sucede en países donde la democracia brilla por su ausencia y el Estado se rige por normas machistas como los que procesan la religión del Islam). De todos es sabido que la mujer tiene que luchar más y tiene que esforzarse más para conseguir la igualdad con el hombre. Por ejemplo la desigualdad existente en el ámbito del trabajo es notoria. Puestos similares entre hombres y mujeres no significa sueldos similares. Las mujeres suelen cobrar una media de un 25% menos que los hombres desarrollando actividades similares. Los puestos directivos suelen estar vetados todavía para las mujeres (hay muy pocas mujeres en los Consejos de Administración de las grandes empresas). En el ámbito doméstico esta desigualdad se acrecienta más. Las mujeres suelen hacer la mayoría de las tareas del hogar dejando al hombre una parte marginal (en los países mediterráneos esta diferencia se acrecienta más que en los septentrionales). en la política también sucede algo similar. A pesar de las leyes de paridad, hay más hombres que mujeres en los cargos políticos. Y todo esto es aquí y ahora. Con la actual crisis económica las diferencias se han acentuado todavía más y en los países en vías de desarrollo estas diferencias son todavía más notorias. El índice de analfabetismo en el sexo femenino es mayor que en el masculino. Las mujeres carecen de cualquier derecho básico, no pueden ejercer su derecho al voto, no pueden presentarse como candidatas a ningún tipo de elecciones (cuando las hay), las leyes las desamparan en todos los sentidos siendo discriminadas por los hombres a diario. Es indignante, injusto, intolerable y lamentable. Me quedo sin adjetivos para calificar esta situación. Esperemos que la cosa cambie, necesitamos que todos pongan su granito de arena para revertir esta situación. Poco a poco las cosas cambiaran. Esperemos.
John Hemmingson: The Business Savant
Hace 1 año
No hay comentarios:
Publicar un comentario