miércoles, 27 de abril de 2011

Día 5, miércoles 20 de abril: Nápoles


La visita de hoy ha estado dividida en dos partes. Primero hemos estado (de forma fugaz, eso si) en la ciudad de Nápoles. Un poco de historia y un breve recorrido en autocar por los lugares más emblemáticos. Posteriormente nos hemos dirigido a la ciudad romana de Pompeya. Durante el viaje (que por fortuna ha durado poco) hemos contemplado en monte Vesubio. Pesea la distancia ese volcán impone respeto. Ya en Pompeya hemos dispuesto de dos horas para ver las ruinas arqueológicas más destacadas del lugar italiano. Evidentemente ha sido muy poco tiempo y nos han quedado muchas cosas por visitar. Según la guía, se necesitan tres días completos para ver toda la ciudad romana. Más tareas pendientes. Es obvio que tendré que volver a Pompeya para terminar el trabajo. No tuvimos fortuna con el grupo que nos tocó en suerte. Demasiados niños impertinentes que dificultaban la tarea de la guía y del grupo en general. Hay ciertas cosas que los niños no pueden hacer (ya sea por aburrimiento o por cansancio) y visitar ruinas es una de ellas. Aquí se demuestra la mala fe de los padres obligándolos a ir a estos sitios que no son para ellos. El día que existan cruceros y excursiones sin niños se habrán abierto las puertas del paraíso.

Por la tarde descansamos en el barco (excepto Álex que volvió a Nápoles a hacer unas fotos) y nos preparamos para la cena. Después lo típico, espectáculo en el teatro del barco, unas copitas y a dormir.


No hay comentarios:

Publicar un comentario