Cementerio nuclear

Volvemos a tener lío como viene siendo habitual en este país. Ahora el tema en disputa es el cementerio nuclear, es decir, el Almacén Temporal Centralizado (ATC) de residuos nucleares (bonito eufenismo). El Ayuntamiento de Ascó (Tarragona) aprobó ayer por siete votos a favor y dos en contra su candidatura a acoger el cementerio nuclear, mientras a las puertas del edificio consistorial cientos de vecinos de la zona protestaban por el almacén temporal centralizado. El alcalde de la localidad, Rafael Vidal, dijo que "el riesgo es nulo" y que "afirmar lo contrario es crear una alarma social injustificada". "Es una oportunidad de futuro que no podemos dejar escapar", dijo respecto al cementerio. Ahora, la última palabra la tiene el Gobierno Central, que deberá decidir entre el municipio catalán, Yebra (Guadalajara) o Villar de Cañas (Cuenca). Este último municipio, gobernado por el PP, también se ha postulado como candidato. De esta forma ya son dos los municipios de Castilla La Mancha que optan por el almacén temporal. El President de la Generalita de Catalunya, José Montilla, transmitirá por escrito al ministro de Industria su rechazo al cementerio de Ascó. Por su parte, el presidente del Gobierno, Zapatero, asegura que la ubicación se decidirá "por consenso". CiU expedientará a sus concejales y el PSC no tomará medidas, de momento, contra los suyos. Se espera que hoy sobre las 20 horas haya una concentración contra la candidatura en la plaza Sant Jaume de Barcelona. Desde cierta distancia y sin conocer todos los detalles sobre el conflicto, opino que no hay para tanto. Tal como están las cosas económicamente, con la tasa de paro más elevada de Europa, con unos presupuestos municipales muy limitados, albergar el cementerio puede ser bastante provechoso para la ciudad de Ascó. Además, está casi garantizada la seguridad y ya hay una central nuclear a pleno rendimiento en la zona. Encuentro de lógica que el almacén se situe cerca de las centrales, el municipio está concienciado y es una forma de garantizar puestos de trabajo para los ciudadanos de la zona. Es evidente que hay algún riesgo pero bajo mi punto de vista considero que los beneficios son mayores que los inconvenientes. Creo sinceramente que la postura del consistorio ha sido valiente y decidida. Por una vez los políticos han hecho algo bien. Lástima que el Govern de la Generalitat no opine lo mismo.